El edificio histórico que albergó el asilo de Nuestra Señora del Remedio, más conocido como asilo de Benalúa, pasará a formar parte definitivamente del patrimonio municipal. El Ayuntamiento lo declarará Bien de Relevancia Local y mantendrá su uso dotacional, aunque todavía no se ha decidido cuál.

Después de dos años de negociaciones con el Obispado de la Diócesis Orihuela-Alicante, está a punto de firmarse un convenio entre ambas instituciones para llevar a cabo la transacción. El Consistorio acordó investigar si realmente le corresponde a la autoridad eclesiástica la propiedad del edificio, que fue cedido para su uso como asilo, y finalmente ha determinado que así es.

En el convenio se fijan las condiciones para la expropiación forzosa del edificio y la finca en la que se ubica. El pago del justiprecio se realizará en especie, con terrenos del patrimonio municipal de suelo.

Por parte del Ayuntamiento se ofrece en primer lugar la parcela situada en la avenida Historiador Vicente Ramos, número 10, en la playa de San Juan. La cantidad de suelo de esta parcela que se destinará al pago del justiprecio dependerá de la cuantía de éste, una vez fijada en el expediente expropiatorio.

Se da la circunstancia de que en esta parcela de propiedad municipal estaba prevista la construcción de 120 viviendas de protección oficial que nunca llegaron a ejecutarse, lo que generó gran polémica. Y es que el Patronato de Vivienda llegó a convocar un concurso de ideas para desarrollar el proyecto, que nunca se desarrolló.

Ya se intentó utilizar esta parcela como moneda de cambio para el uso de suelo para el mercadillo de Teulada, pero fracasaron las negociaciones con el propietario de este último, lo que obligó a reducir el espacio del mercadillo.

Además, de precisarse otras parcelas, por no alcanzar la de Vicente Ramos el valor del suelo expropiado, se le sumarían otras parcelas más.

Se trata de un negocio muy interesante para el Obispado, que se deshace así de una parcela dotacional para cambiarla por otra u otras residenciales.

Hay que recordar que la autoridad eclesiástica ha intentado en varias ocasiones que Urbanismo recalificase el suelo para convertirlo en residencial y poder venderlo y obtener pingües beneficios por el terreno.

Primero lo hizo mediante alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en trámite. Alegaciones que le fueron admitidas.

No obstante, dado que el plan está paralizado desde hace años, en 2012 volvió a reclamar la recalificación de los terrenos, en forma de modificación puntual del Plan General en vigor. Un extremo que en esta ocasión le rechazaron, porque empezaban a calar en el Consistorio las voces de vecinos, historiadores y oposición, que reclamaban que el asilo no se demoliese, sino que se incorporase al patrimonio municipal y se protegiese. Un extremo defendido incluso por un informe del Consejo Valenciano de Cultura.

Así, en enero de 2013, el Pleno aprobaba una moción conjunta de PP y UPyD (meses antes se había rechazado una similar de EU) en la que el Ayuntamiento se comprometía a iniciar los trámites para adquirir el antiguo asilo y para integrarlo en el Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos como Bien de Relevancia Local. Comenzaban entonces las negociaciones con el Obispado sobre las condiciones de tal adquisición.

Ubicado entre la avenida de Aguilera y Santa María Mazzarello, el edificio fue cedido por los marqueses de Benalúa para que se instalase allí el asilo, que fue construido con aportaciones populares. Aunque ha sido profundamente remodelado, se conservan la capilla y la cripta del siglo XIX, en la que está enterrado el marqués de Benalúa, de gran valor histórico. También son relevantes los jardines, que tienen especies de gran valor.

EU cuestiona que la Iglesia sea la propietaria

El portavoz municipal de EU, Miguel Ángel Pavón, cuestionó ayer que el Obispado de Orihuela-Alicante sea el propietario del asilo de Benalúa. El edil recordó que el antiguo asilo recibió aportaciones económicas de ciudadanos y de instituciones como el propio Ayuntamiento o la Diputación, «unas aportaciones que cabría investigar si dan derecho a algún tipo de titularidad pública del inmueble, que desde un principio tuvo una finalidad asistencial», consideró Pavón.

El concejal critica que el borrador del convenio de expropiación dé por hecho que el Obispado es el titular, y anunció que trasladará a Urbanismo una petición para que, antes de tramitarse el convenio, haya plenas garantías al respecto.

Considera positiva la adquisición del inmueble para que pueda albergar dotaciones públicas que necesitan el barrio de Benalúa y otros barrios cercanos, pero siempre y cuando quede acreditada la titularidad del inmueble e investigada la posible titularidad pública derivada de las aportaciones económicas ciudadanas e institucionales que recibió el asilo.

Además, Pavón asegura que llama la atención que este tema se haya reactivado tras haber pasado casi dos años desde que el pleno aprobó por unanimidad el 30 de enero de 2013 iniciar los trámites para adquirir el asilo. «Quizá el PP no quiera dejar este asunto en manos de futuras corporaciones en las que puede que no gobierne y quiera dejar atado y bien atado un convenio favorable a los intereses de la Iglesia», apostilla.

Fuente: Periodico La Verdad