Benalúa, un barrio céntrico, a un paso de las estaciones de tren y autobuses, con los juzgados y la comisaría más importantes de Alicante y con multitud de establecimientos al alcance de todos los que allí habitan. Un sueño para algunos y una lucha constante para otros. Sillas en la puerta de casa y pipas, kit esencial al que los vecinos tienen que recurrir para reunirse y pasar el rato, ya que no cuentan con un centro social como la mayoría de los barrios de la ciudad.

Los vecinos de Benalúa llevan reclamando 25 años un centro social, ya que 19 barrios de Alicante cuentan con uno. Alrededor de 9500 personas habitan en este distrito de la ciudad, de las cuales casi un 30% tiene más de 65 años, según datos del padrón municipal de Alicante. Según el ayuntamiento, el centro social al que les corresponde ir está situado en La Florida, pero la mayoría de los vecinos no pueden acudir porque su situación física no se lo permite.

Desde el 11 de febrero de 2023, la asociación de vecinos ‘El Templete’ se reúne cada sábado en la plaza del barrio a manifestar un centro social. Aunque llevan 25 años intentando conseguirlo, no fue hasta el año pasado que tomaron la decisión de manifestarse, ya que el ayuntamiento hace caso omiso a sus propuestas. Según los vecinos han solicitado en varias ocasiones una entrevista con el Alcalde de Alicante Luís Barcala, pero la única respuesta que han obtenido es que estaban pendientes de encontrar financiación y que siguen trabajando en ello. Donde solicitan que se construya esta infraestructura social, es en el antiguo asilo de Benalúa, que es un lugar céntrico desde todos los puntos del barrio.

El antiguo asilo de Benalúa ha estado funcionando casi 100 años hasta que, en la década de los 80 cerró sus puertas. Se hizo una cuestación en toda la ciudad y con la aportación del ayuntamiento y la diputación compraron el asilo y se inscribió a nombre del obispado. Los vecinos tienen la idea de recuperar ese edificio en el que creen que podría estar el centro social y la biblioteca. En 2015 el alcalde en funciones Miguel Valor, hizo un convenio con el obispado en el que el asilo pasaría a ser partida municipal y ese inicio de negociación no se llegó a perfeccionar. “Mi madre no ha podido ver el centro social y yo no sé si llegaré a verlo, espero que mis nietos puedan tenerlo y haya servido de algo esta lucha” declara Carmen Navarro secretaria de la asociación de vecinos.

“Mi madre no ha podido ver el centro social y yo no sé si llegaré a verlo, espero que en un futuro mis nietos puedan tenerlo y haya servido de algo esta lucha” | Carmen Navarro, secretaría de la asociación de vecinos

Para combatir este problema, los vecinos organizan sus propias actividades al aire libre como clases de zumba, yoga o taichi. “No estamos pidiendo un ‘hogar del jubilado’, ese modelo esta totalmente caduco y no tiene nada que ver con un centro social. Queremos un complejo arquitectónico dónde podamos convivir adultos y jóvenes” afirma Ernest Gil, presidente de la asociación de vecinos. Según estadísticas del Observatorio Estatal de la Soledad No Deseada el 13.4% de la población española está en situación de soledad, y que sin un centro social hace que ese porcentaje se estabilice y no decrezca, sino todo lo contrario. “Este tipo de instalaciones podría paliar este problema del que tan poco se habla” comenta Gil.

“No estamos pidiendo un ‘hogar del jubilado’, ese modelo esta totalmente caduco y no tiene nada que ver con un centro social. Queremos un complejo arquitectónico dónde podamos convivir adultos y jóvenes” | Ernest Gil, presidente de la asociación de vecinos

Un centro social además de ser un lugar de convivencia, en el que se desarrollan distintas actividades de ocio, también se centra en tramitar otros asuntos como ayudas económicas y servicios sociales para el acogimiento de familias, para combatir la violencia doméstica, para tratar a adolescentes con problemas toxicológicos…

Por su parte, los centros sociales de otras partidas municipales coinciden en que son una parte del sector público que el ayuntamiento menos tiene en cuenta en cuanto a las propuestas que ellos solicitan para mejorar los servicios. “Para ser capital de provincia los centros sociales en Alicante, funcionan peor que en Elche, Elda o cualquier otro pueblo de los alrededores. Se están dando citas para cuatro o cinco meses. Tanta era la presión de las quejas que nos llegaban, que tuve que pedir un cambio de puesto a otro sector” apunta Delma García ex-trabajadora de la Jefatura del Bienestar Social.

“Se están dando citas para cuatro o cinco meses. Tanta era la presión de las quejas que nos llegaban, que tuve que pedir un cambio de puesto a otro sector” | Ex-trabajadora de la Jefatura del Bienestar Social

Actualmente en Alicante se están llevando a cabo muchas obras que para los vecinos son “innecesarias” como la reciente apertura de una calle peatonal en La Rambla, por lo que se cuestionan que otros municipios de la provincia como Arenales del Sol o Torrellano que son mucho más pequeños, tengan presupuesto para construir un centro social y Alicante no lo tenga. Cada sábado de concentración en la plaza de Benalúa, los vecinos envían un correo electrónico con una fotografía de la manifestación y un breve acta para recordar que no pararán de luchar por lo que tanto tiempo llevan esperando: un centro social comunitario.

Fuente: Medium-Tatiana Verdu