Al margen de la sesion.

La cuestión de la tala de los pinos del Barrio de Benalúa, ha despertado el espíritu de nuestros concejales, y ha hecho que se volviese a recapacitar sobre el absurdo acuerdo adoptado.

Ante la discrepancia de criterios existentes entre los señores concejales, estos se han dividido en dos bandos.

Unos, con criterio humanista y sentimental, apoyan a los mil vecinos que piden sean repetados aquellos árboles que por tanto tiempo sirvieron de sombra protectora a las generaciones.

Los otros, abogan por la desaparición de los pinos, abogando unos razonamientos admisibles hasta cierto punto pero que llevados a la realidad de la vida, carecen de fuerza convincente.

El señor Mora Valero pidió quedase éste asunto 8 días más sobre la mesa, para que todos los señores concejales pudiesen estudiar detenidamente el informe hecho por la Comisión de Fomento.

Los ediles Pomares, Monleón, Ruiz, P.Aguila, Tari, Beltrán de la Llave, Sierra, M.Sansano y Botella, salieron en defensa de la conservación de los pinos de Benalúa.

Los demás se pronunciaron por la desaparición.

El acuerdo adoptado fué, el de hacer un referendum entre los vecinos de aquella barriada.

Este asunto es posible que quede como aquel acuerdo del señor Suarez Llanos, sobre el cambio de las puertas del Ayuntamiento, por unos cierres metálicos.

La sesion.

A las seis y media ................

De Oficio

Se da cuenta al ...............

Orden del dia

Se acuerda donar .............

Ruegos y preguntas

El Sr. Antón .................

Los pinos de Benalua

El batallador edil radical Sr. Ruiz P. Aguila hace uso de la palabra en defensa de los pinos del barrio de Benalúa.

Con frases llenas de cariño para aquellos pinos que hermosean el barrio más típico de nuestra población, dice, que la Corporación, por premura de tiempo, resuelve muchos asuntos sin capacitarse plenamente de ellos. Así ha ocurrido con los pinos de Benalúa, que se aprobó el informe de la Corporación demasiado lijeramente.

El acuerdo ha levantado una polvareda, en la que 300 cabezas de familia del barrio, han protestado ante el acuerdo del Ayuntamiento. Ante esta fuerza numérica de vecinos, hay que dejar sin efecto el acuerdo adoptado.

El señor Sierra, como miembro de la Comisión de Fomento, contesta al señor P. Aguila, diciéndole, que él se opuso terminantemente a la tala de los pinos, pero hubo uno que le convenció de la necesidad urgente que había de quitarlos. Hoy visto el clamor que se ha levantado, reconoce la arbitrariedad del acuerdo, y se opone a la tala de dichos árboles, por estimarlos que son algo del alma de Benalúa.

El también batallador edil señor Pomares Monleón, pide la palabra, para salvar su voto. Dice, que en la sesión pasada acudió al Ayuntamiento, recién venbido de Teruel, solamente para saludar a sus compañeros de Concejo, y como figura su nombre en el acta de la sesión, no quiere aparecer nunca como uno de los que pidieron la destrucción de aquellos hermosos árboles.

El señor Botella, hace una oración ensalzando los pinos de Benalúa. Recuerda al llorado Doctor Rico, y a Joquín Costa, que enseñaron a la democracia actual, a amar y respetar a los árboles. Se conduele de que el Ayuntamiento tomase el acuerdo de la tala, y pide se rectifique el acuerdo adoptado.

El señor Antón también pide la rectificación del acuerdo.

El señor Mora Valero, en vista de que no existe acuerdo, pide quede este asunto 8 días sobre la mesa, para que todos los señores concejales puedan estudiar detenidamente el informe de la Comisión de Fomento.

El Alcalde señor Carbonell, para contestar a lo expuesto por los demás señores concejales, pide ser sustituido por el primer teniente de alcalde, para él, desde los escaños, poder dar su opinión.

El Concejo autoriza al señor Alcalde, para que hable desde la Presidencia.

El señor Carbonell, comienza haciendo un estudio de los pinos y de las palmeras. Califica a los que abogan por que no desaparezcan los pinos, de unos sentimentalistas. Nos hace volver a la época de la tala de los hermosos árboles de la Avenida de Méndez Núñez, y no podemos menos de acordarnos de aquella barbaridad que se cometió con el arbolado.

Parece ser, que el criterio del señor Carbonell, es repetir lo hecho en tiempos en que la libertad de expresión estaba coartada, y las lamentaciones del vecindario de la Avenida de Méndez Núñez, quedaron arrinconadas por el convencionalismo de un Ayuntamiento faccioso.

El señor Alcalde, expone unas razones que solamente pueden convencer a sus incondicionales, pero no a los vecinos del barrio de Benalúa, aunque el informe emitido por el señor Ingeniero municipal, diga que es necesario la tala de los expresados árboles.

El señor Carbonell, nos explica un curso de botánica completo, para defender la tesis que contiene el informe de la Comisión de Fomento, asesorada por el señor Ingeniero y nos hace sonreir cuando habla de la tristeza que dan los pinos del polvo y las bolsas que se forman.

El señor Pomares Monleón, contesta al señor Carbonell, manifestándole, que si existen polvo y bolsitas, es por el descuido que ha tenido siempre el Ayuntamiento en el arbolado.

El señor Mora Valero, manifiesta que comparte con las razones expuestas por los señores Pomares y P. Aguila y que los pinos son alegres. Para darle solución a este asunto, pide se haga una votación entre los vecinos de Benalúa, y que sean ellos los que digan la última palabra sobre el asunto.

Por unanimidad se acuerda ir a un referendum, entre aquel vecindario.

Nosotros tenemos la seguridad de que pinos continuarán dando al barrio de Benalúa su actual clasicismo.

Las fiesta de enero próximo

El señor Mora Valero ...............

Y no habiendo más asuntos de qué tratar, se levantó la sesión a las 7,30 de la noche

Diario de Alicante Año XX Número 6593 - 1932 octubre 22

Fuente: Biblioteca Virtual Prensa Historica